El Experimento Chipre: El Euro se rompe en silencio.
Ya está aquí la temida abolición de facto de la libre circulación de dinero entre países de la Eurozona. Y ha sucedido como siempre, de modo discreto, sin luz ni taquígrafos, y en el país de los experimentos con gaseosa mediterránea: Chipre. El primer caso que ha saltado a la palestra del New York Times ha sido el de Marios Loucaides, un hombre de negocios chipriota que tuvo la osadía de querer comprarse un apartamento en la vecina Atenas hace unas semanas.
No os penséis que se trataba de ninguna compra mastodóntica ni de millones de euros, no. Se trataba de comprar un simple pisito de 170.000′- euros. El Sr. Loucaides acordó con el propietario ateniense que le transferiría el importe a su regreso a Chipre, algo que debiera ser de lo más normal y habitual entre países de la UE que comparten moneda en la tan cacareada Eurozona. Pero no. El dinero no pudo salir del país tras infinitos impedimentos, y la compra-venta se abortó. El propietario ateniense tendrá que buscarse un comprador con dinero de verdad, es decir euros no chipriotas.
Como bien denuncia el Sr. Loucaides, un euro en Chipre ya no es lo mismo que un euro en Portugal, España o Grecia, ni por supuesto en Alemania. «El euro de Chipre es de segunda clase«, dijo el empresario chipriota. Y así es, aunque a muchos españoles les cueste creerlo (precisamente los mismos españoles que tampoco creen que sus depósitos en los bancos de aquí puedan ser confiscados en cualquier momento, por cierto).
De hecho, los controles de capitales son una herramienta utilizada en tiempos de crisis en todo el mundo, y a pesar de que son extremadamente raros en Europa, haberlos haylos. Por ejemplo Islandia, que no es miembro de la UE y utiliza su propia moneda, impuso dichos controles en 2008 después del colapso de sus principales bancos. Y en eso estamos precisamente en la periferia europea, pero de manera más sutil, de momento.
Con un PIB de sólo 23.000 millones de euros, y cayendo, Chipre es poco más que un grave error en una eurozona con un peso de 9,5 billones. Pero también ese pequeño país mediterráneo es el primero que está abriendo camino en la restricción de la libre circulación de los euros en la Eurozona. Y la pregunta que cabe hacerse ahora es: ¿Ha comenzado ya la ruptura de la Eurozona que tantas reuniones febriles, desesperadas y de madrugada han generado en Bruselas? ¿Han sido en balde tantos intentos periódicos desesperados, y tantos centenares de miles de millones de euros sacados de la chistera para evitar esta fractura en los últimos tres años? Posiblemente y aunque nos pese, así es.
El Presidente de Chipre, Nicos Anastasiades así lo cree: «Realmente ya estamos fuera de la Eurozona«, dijo aludiendo a las restricciones impuestas al movimiento libre del capital de los bancos chipriotas. Esa es la mayor evidencia de que los euros de Chipre tienen un status diferente que el de los alemanes o franceses, e incluso que el del los 14 países restantes.
Es una situación extraña, dijo el Sr. Anastasiades en una entrevista. Las reglas de la UE dejaron bien claro en el Tratado de Maastricht que se prohibían las limitaciones sobre los flujos de capitales, pero las medidas tomadas en Chipre por el BCE y el brazo ejecutivo de la UE, la Comisión Europea, impiden de facto que el dinero salga del país. Y al mismo tiempo que el BCE evita hacer declaraciones sobre la situación de Chipre, la versión oficial en Bruselas sigue aparentemente comprometida con mantener el Euro como una moneda unida y única (sic). Una muestra más de que la política cada vez se aleja más de la realidad, la verdad y la ética.
Sin embargo, diversas voces como la de Guntram B. Wolff, el director de Bruegel, un grupo de investigación de Bruselas, mantienen que Chipre ha sido expulsado de facto y en silencio de la Eurozona, ya que «el euro en Chipre no es el mismo que el euro de Frankfurt«. El corralito impuesto en Marzo ha sido relajado ciertamente, pero sigue siendo una barrera insalvable para los negocios y para cualquier actividad económica de los chipriotas en el extranjero. Por poner un ejemplo, una letra de crédito de un banco chipriota es papel mojado, y los empresarios se ven obligados a pagar por adelantado las mercancías extranjeras.
Las condiciones restrictivas son constantemente cambiadas. Los límites para personas físicas o empresas son poco a poco más laxos, pero se exige la presentación de facturas y todo tipo de documentos para justificar cualquier movimiento hacia el extranjero. Y para importes superiores a los 300.000 euros en personas físicas y 500.000 euros en empresas, se precisa de la autorización explícita del banco central. Prohibitivas trabas para cualquier operativa de comercio internacional, que hacen imposible competir con transacciones fluídas y libres en otros países, lo cual ahonda el colapso de la economía doméstica chipriota.
Todavía está prohibido cobrar cheques en efectivo o abrir cuentas nuevas, a no ser que ya se tenga otra previamente abierta en el mismo banco. Las personas no pueden retirar más de 300 euros al día, y las empresas 500 euros diarios. Letreros en los aeropuertos advierten a los viajeros que no pueden sacar del país más de 3.000 euros por persona adulta. Como en cualquier dictadura bananera al uso, vamos.
Todas estas restricciones y papeleos exigidos, añadidos a los costes aumentados de cualquier transacción, hacen que efectivamente el valor de un euro en Chipre sea menor que el de un «euro libre» en el resto de países de la Eurozona. «Nuestros euros parecen euros y los percibimos como euros, pero no son realmente euros«, dijo Alexandros Diogenous, director ejecutivo de Unicars, una compañía de Nicosia que importa coches del grupo VW en Alemania. «Una prueba de ello –dice el Sr. Diogenous– es el diferencial de tipos de interés entre Chipre y el resto de la Eurozona. Yo estoy pagando un 7,75% en créditos a largo plazo, y mis socios de Alemania pagan 3 o 4%«, dijo. Y además la mayoría de bancos chipriotas han dejado de prestar a ningún precio. ¿Todo esto os debe resultar familiar, verdad…? Pues recordad aquello de las barbas del vecino peladas y el remojo necesario para las propias.
«El trato que se le da al euro chipriota pone en riesgo la esencia de la moneda única en su conjunto«, dice Harris Georgiades, el nuevo Ministro de Finanzas de Chipre. Dice que le gustaría levantar las restricciones al final de este 2013, pero que para eso necesitaría una ayuda, no cuantificada, por parte del BCE, que garantizase que el sistema bancario chipriota se pudiera sostener en pie. O sea, ese añorado bail-out al estilo griego y portugués, que los europeos del norte han decidido que jamás vuelva. Un conjuro germano-holandés-finlandés que, por otra parte es de lo más lógico, ya que blinda directamente sus bolsillos bárbaros.
El problema de los controles de los movimientos de capital es que se sabe cuándo se imponen pero no cuándo se podrán eliminar. Porque el miedo a lo que puede suceder cuando se devuelva la libertad de movimientos, retroalimenta el mal funcionamiento del Sistema. Los controles de Islandia siguen vigentes 5 años después. Y las autoridades chipriotas dijeron inicialmente que se trataba sólo de controles de una semana, extendiéndolos después a 30 días… Ya han pasado 4 meses desde aquellos artículos que titulamos «El corralito empieza hoy» y «Chipriotas o idiotas«, y las autoridades siguen esperando dinero fresco del BCE que les despierte, al menos temporalmente, de la pesadilla del corralito y la confiscación bancaria. Un dinero que huelga decir que jamás llegará.
Pero lo que es peor es que Chipre ni siquiera goza de las ventajas de no tener el mismo euro que el resto. No puede devaluar su moneda como lo pueden hacer británicos o suecos. Ellos están presos en una celda de castigo monetario sin fecha de caducidad. Con el ejemplo de Chipre quedó claro que los bail-out serían a partir de ahora bail-in, y parece que el siguiente paso será utilizar el «experimento Chipre» para probar la creación de un euro de segunda clase con aspecto y corrección política de primera, extrapolable al resto de periferia en apuros.
Como dijimos en «La Eurozona ha muerto: Viva Europa«, parece que se desvanece confidencialmente la moneda única. Y la separación, de modo informal, de Chipre del resto de la Eurozona, es obviamente el experimento piloto para llevar un paso más allá la ruptura del Euro, cuando y allí donde la unión se haga insostenible.
Hoy algunos ya nos percatamos de que los préstamos en euros tienen un tipo de interés distinto al precio de los euros alemanes o luxemburgueses, y de que la seguridad de los depósitos de esos euros en bancos españoles se desvaneció hace algunos años, al igual como la solvencia de la deuda soberana. Y debemos prepararnos, porque podemos estar peligrosamente cerca de que los euros dejen de gozar de la movilidad actual, como les ha ocurrido a los chipriotas. Porque no se trata de medidas y desgracias financieras lejanas como las que suceden periódicamente en Argentina o Zimbabue, no. Muchas de las cosas que suceden en Chipre ya nos están ocurriendo también al resto de la periferia europea. Pero la mayoría de inversores y ahorradores se darán cuenta demasiado tarde, cuando sus euros hayan ya perdido la libre movilidad y hayan quedado más o menos cautivos en una maraña de legislaciones que rezarán para que sean «excepcionales y temporales«, como todo gobierno promete impúnemente. Pero cuando acepten la cruda realidad y comprendan que, sin saber cómo ni cuándo, la situación cambió para siempre, esos euros de mobilidad reducida, sus euros, ya no valdrán como los euros alemanes. Y la cruda realidad será que sus patrimonios no habrán podido evitar esa metamorfosis kafkiana de la mal llamada Moneda Única.
Imagino que no habrá limitaciones en la entrada de dinero de otros países de la UE en Chipre. Que las restricciones solo son de salida de capitales. Mantener cuenta/s en países de la EU de alta calidad crediticia, o incluso fuera de la UE sería una alternativa para que cualquier empresa pueda hacer frente a sus pagos.
Saludos cordiales,
Valentin 15/07/2013Valentin
Imagino que no habrá limitaciones en la entrada de dinero de otros países de la UE en Chipre. Que las restricciones solo son de salida de capitales. Mantener cuenta/s en países de la EU de alta calidad crediticia, o incluso fuera de la UE sería una alternativa para que cualquier empresa pueda hacer frente a sus pagos.
Saludos cordiales,
Valentin 15/07/2013Valentin
Claro, el problema es que quien no las tuviera ya antes del corralito, o bien genere ingresos en el extranjero no necesarios para el funcionamiento de la empresa, tampoco podrá deslocalizarlo ahora. Además, intuyo que quizá se obligue a repatriar cualquier actividad económica en el extranjero de empresas locales. En definitiva, el Estado chipriota (y el resto de periferia en apuros) va a legislar para repatriar, bloquear y confiscar todo lo habido y por haber.
ClusterFamilyOffice 15/07/2013De hecho tenemos ya casos de empresarios que prefieren mantener una parte de su tesorería en bancos fuera de España, para que un hipotético bloqueo o restricción, no impida la supervivencia del negocio. O sea aprovechar ahora que todavía podemos transferir dinero libremente al extranjero, y los euros españoles aún son "libres" y valen lo mismo que los alemanes.
Un abrazo.
Sobre: "En definitiva, el Estado chipriota (y el resto de periferia en apuros) va a legislar para repatriar, bloquear y confiscar todo lo habido y por haber. "
Ya sabes, que comparto casi todo lo que expones. Tenemos puntos de vista muy similares.
Lo que no entiendo es como un país puede legislar para repatriar capitales (entiendo en tu frase que arriba indico). Pueden crear impuestos elevados para capitales disponibles en el extranjero, pero de ahí a que puedan obligar a repatriar el capital no está dentro de mi imaginación.
Desconozco si habrá habido algún caso (histórico) ejemplar al al respecto. Si se te ocurriese algo al respecto, agradecido estaría de que lo compartieses.
Un cordial saludo,
Valentin 15/07/2013Valentin
Valentín, medidas excepcionales en países en apuros se han visto a lo largo de la historia. Y lo que hoy parece impensable, de repente sucede, siempre por sorpresa y con promesas de temporalidad. En argentina vimos cómo se obligaba a las aseguradoras a repatriar sus activos en el exterior http://www.elmundo.es/america/2011/10/28/argentina/1319808810.html o incluso las inversiones de los fondos de pensiones en países vecinos (http://www.globalaging.org/pension/world/2007/argentino.htm). Otros países como Ecuador obligó a sus bancos a repatriar también sus activo en 2009 (http://wvw.nacion.com/ln_ee/2009/junio/01/economia1981474.html). Supongo que con un poco de hemeroteca podrías encontrar otros muchos y tristes ejemplos. Como ves, no parece algo tan descabellado cuando la necesidad de un Estado aprieta. Y en eso estamos, aunque como decimos en el artículo,los euros españoles aún son libres y valen lo mismo que los alemanes. ¿Por cuánto tiempo? Ya se verá, pero los más previsores harían bien en tomar sus medidas de precaución sin descuidar el norte de invertir allá donde hay crecimiento económico y Valor.
@ClusterFO 15/07/2013Muchas gracias Gurus por estos últimos enlaces. Te debo una.
Como suelo decir, "situaciones excepcionales requieren de medidas excepcionales". Pero desconocía que llegasen a ese extremo. Nuevamente gracias por arrojar "bien de luz" en el complejo entorno que nos toca vivir.
Un abrazo,
Valentin 15/07/2013Valentin
[…] El Experimento Chipre: El Euro se rompe en silencio. […]
Chipre ha sido expulsado de facto y en silencio de la Eurozona | Tradición Digital 15/07/2013[…] El Experimento Chipre: El Euro se rompe en silencio. (Cluster Family Office) […]
10 artículos recomendados para inversores XVAcademia de Inversión – Aprende value investing desde cero 15/07/2013[…] creo que queden años para ello), estaremos ya muy cerca del desenlace para el cual se realizó el Experimento Chipre. Es decir, un escenario de rescate interno (bail-in) en el que se confisque todo el valor necesario […]
La recuperación y la estabilidad ya están aquí... eppur si muove! 15/07/2013[…] creo que queden años para ello), estaremos ya muy cerca del desenlace para el cual se realizó el Experimento Chipre. Es decir, un escenario de rescate interno (bail-in) en el que se confisque todo el valor necesario […]
La recuperación y la estabilidad ya están aquí… eppur si muove! | Economia y negocios en rss 15/07/2013[…] creo que queden años para ello), estaremos ya muy cerca del desenlace para el cual se realizó el Experimento Chipre. Es decir, un escenario de rescate interno (bail-in) en el que se confisque todo el valor necesario […]
La recuperación y la estabilidad ya están aquí… eppur si muove! 15/07/2013[…] creo que queden años para ello), estaremos ya muy cerca del desenlace para el cual se realizó el Experimento Chipre. Es decir, un escenario de rescate interno (bail-in) en el que se confisque todo el valor necesario […]
La recuperación y la estabilidad ya están aquí… eppur si muove! | Pullback 15/07/2013[…] […]
Anónimo 15/07/2013