¿Te ha tocado el Gordo de la Lotería? Las 5 primeras decisiones que debes tomar.
La mayoría de afortunados de premios de Lotería acaban perdiendo toda su fortuna en pocos años. Esta es una cuasi-ley universal que afecta a la inmensa mayoría de agraciados, ya que las decisiones equivocadas comienzan ya desde el minuto 1 después del sorteo. Veamos cómo se pueden evitar las malas decisiones en los primeros días o semanas después de ser elegidos por la diosa Fortuna. Las resumiremos en 5 decisiones esenciales y os las presentamos en el orden cronológico habitual en el que se deberían adoptar.
La primera regla de oro sería la de la máxima discreción. Cuanta menos gente sepa que nos ha tocado el Gordo o cualquier lotería primitiva, euromillones, etc. mejor, mucho mejor. No sólo por seguridad -que también- sino para evitar en la medida de lo posible convertirse en un reclamo tentador para estafadores, embaucadores y cazadores de inversión con y sin escrúpulos. Y en ese saco hay que meter también a los banqueros, que acecharán inmediatamente a sus presas en cuanto huelan la sangre del nuevo rico y su irresistible liquidez. No obstante, a algún banquero habrá que decírselo, ya que el décimo o décimos premiados deben ingresarse en un banco para su cobro y correspondiente retención del 20%, o sea la primera mordida fiscal del Estado. Pero ojo, hay que utilizar al banco y su simpático y elegante director como un mero intermediario para convertir el billete premiado en cuenta corriente con la cifra ya abonada y neta, y no como el gestor/asesor de ese dinero. De lo contrario, el banquero tratará de colocar ese botín de manera inmediata en inversiones que garanticen la cautividad de esa fortuna en la entidad para la que trabaja, dificultando así la libertad de movimientos y de decisiones que el afortunado deberá tomar en las siguientes semanas o meses. Por eso la segunda decisión vital es que el décimo se ingrese en un banco para su cobro y correspondiente retención fiscal, pero exigiendo que se abone en cuenta corriente y a la vista el importe neto (una vez practicada la retención fiscal del 20% como explica este artículo de expansión) sin dilación, evitando a toda costa que nos coloquen el dinero en ningún producto bancario, aunque el propio director nos asegure que «es lo mismo que tenerlo en cuenta pero con algo de rendimiento». No sería la primera vez ni la última que los banqueros mienten vilmente para colocar el dinero de sus Clientes donde a ellos más les conviene, ¿verdad? Pues eso. Máxima desconfianza de todos y de todo en las primeras semanas, especialmente de los banqueros.
No nos debe importar que el dinero esté «parado», es decir sin rendir nada o casi nada durante unos días o incluso semanas, hasta que tengamos más claro quién nos va a asesorar financieramente en nuestra nueva vida. Esa va a ser la tercera decisión vital -y la más difícil- que vamos a tener que tomar como nuevos ricos, la de elegir el mejor y más honesto asesoramiento. Y la recomendación general es la de buscar profesionales especializados en la gestión patrimonial en su conjunto, es decir que tengan expertos en su equipo para asesorarnos en la parte financiera, lógicamente, pero también en la parte inmobiliaria, fiscal, legal y de inversión empresarial. Porque vamos a necesitar en el futuro de los servicios de todos o casi todos ellos, y van a tener que asesorarnos de manera absolutamente coordinada. O sea, que no nos sirve tener por un lado un bufete de abogados, por otro un banquero, por otro una empresa de corporate/M&A y por otro una inmobiliaria/administrador de fincas, con intereses todos ellos poco o nada alineados con los de nuestra Familia. Debemos tener un interlocutor único, es decir una empresa que pueda ofrecernos todos estos servicios de manera muy experta y especializada. Que mire exclusivamente por nuestros intereses y se pelee con el resto del mundo para preservar nuestro patrimonio y conseguir que éste crezca de la mejor manera mientras a la vez nos da la felicidad deseada.
¿Dónde podemos encontrar este tipo de empresas? Pues bajo la denominación de Family Office o Multi-Family Office. A partir de ahí deberemos entrevistarnos con las que nos resulten más solventes en cuanto a calidad de equipo, y sobre todo honestas, para finalmente seleccionar una (o dos o tres, dependiendo de los ceros que tenga nuestro premio de lotería) en la o las que deberemos confiar al menos durante el primer año para situarnos y ser capaces de valorar su labor con cierta perspectiva. En función de los resultados, el trato y la calidad de la gestión, deberemos valorar y corregir en el futuro esta decisión de manera constante, ya que no sería prudente dejar en manos de una de estas empresas la gestión de nuestra fortuna de manera ciega e indefinida. Para poder valorar adecuadamente los servicios de Family Office recibidos, lógicamente deberemos formarnos mínimamente. Y un buen Family Office debe ofrecer la posibilidad a sus Clientes de formarles en la medida que ellos lo deseen. Cuanto más seamos capaces de aprender, mejor podremos valorar el servicio de gestión patrimonial recibido, y nuestra toma de decisiones al respecto será mucho más fundada y acertada. Incluso, si se desea y se tiene el conocimiento suficiente, el afortunado puede acabar gestionando su propio Single-Family Office (oficina de gestión patrimonial para una sola fortuna o familia) de la mano de ese Multi-Family Office (oficina de gestión patrimonial de varias familias), que le debe ayudar en la creación de su propia estructura de asesores/gestores/administradores, y en su supervisión en el tiempo.
La cuarta decisión vital que debemos tomar es la de ser muy prudentes con los gastos iniciales, justo después del sorteo. Como nuevos millonarios o ricos, no deberíamos gastar ningún dinero en caprichos/necesidades caras que no hayamos generado en forma de rentas. Es decir, debemos comenzar a gastar dinero sólo a partir del momento en que hayamos comenzado a ganarlo, a generarlo con nuestras inminentes inversiones que vayamos a realizar de la mano del Family Office (FO) contratado. Las necesidades o caprichos que queramos cubrir deberemos comunicarlos a nuestros asesores, por ejemplo: «Quiero comprarme un coche o una casa por valor de tanto lo antes posible». Y deben ser los asesores del FO quienes valoren qué inversiones se deben realizar para generar las rentas necesarias para cubrir los deseos de sus Clientes en el plazo más aproximado posible. Ahí, como es lógico, el FO deberá tener en cuenta la opinión de buena parte de su equipo: Asesores financieros, inmobiliarios y fiscalistas. La optimización de todas estas áreas aportará sin duda las rentas necesarias y un ahorro de costes inmobiliarios y fiscales importantes, que minimizarán el coste que ese Family Office supone para el Cliente desde el minuto uno, o sea desde la primera decisión conjunta entre Cliente y FO. Porque un buen FO no sólo debe generar rendimientos sino que también debe ahorrar todo tipo de costes e impuestos.
Si por el contrario el afortunado nuevo rico empieza gastando antes de empezar a generar rentas y sin el asesoramiento adecuado para ahorrar costes, la evolución de su patrimonio será muy inferior. Y la magia del interés compuesto hará que la foto patrimonial a 5, 7 o 10 años vista sea totalmente distinta para unos y otros, a pesar de haber tenido idéntica fortuna con el sorteo y haber invertido en lo mismo. No estamos diciendo que hacer lo correcto suponga no gastar ni disfrutar del Gordo o de la riqueza obtenida con el premio, en absoluto. El capricho o la necesidad de comprarse una casa, coche, barco, tapar agujeros propios o de familiares, o darse un homenaje alrededor del mundo lo van a poder hacer igualmente tomando la decisión correcta. La única diferencia es que quizá tengan que esperar algunas semanas más para hacerlo de manera planificada y coordinada con la correcta gestión del patrimonio. Nada más. Con el adecuado asesoramiento, el disfrute no está reñido en absoluto con el hecho de tomar las decisiones acertadas y aumentar indefinidamente la fortuna familiar. Entre los Clientes de Cluster Family Office contamos con algunos afortunados de lotería que llegaron a nosotros en diversas fases después de ser agraciados. Y creedme si os digo que los que tardaron más tiempo en recurrir a un FO se arrepienten y mucho de no haberlo hecho antes, puesto que en el camino dejaron una parte importante de su premio a base de tomar decisiones equivocadas al estar mal asesorados por bancos, inmobiliarias y demás parásitos en forma de asesores, socios etc.
Una vez tomadas estas 4 decisiones esenciales después de ser agraciados, la quinta recomendación vital que desde aquí queremos hacer a los futuros premiados del Gordo, Primitiva y demás loterías es un tanto reiterativa, pero que harían bien en grabarse a fuego en sus mentes porque la deberán aplicar y bien durante el resto de sus vidas: No olvidar nunca la tercera decisión vital. La prioridad absoluta para siempre será obtener constantemente el asesoramiento más competente y honesto posible, así como recibir formación de ellos. Y deben centrar sus esfuerzos en tratar de estar siempre en las mejores manos, comparando los family offices, contratando sólo a los mejores en todo momento y a la vez aprender de ellos en la medida de las posibilidades del agraciado. Sólo así la fortuna tendrá posibilidades de perdurar en el tiempo y hacerles felices a la vez que pasa a las siguientes generaciones, garantizando su futuro y su bienestar de por vida.
Resumamos pues los 5 pasos esenciales inmediatamente después de ser premiados:
- Discreción absoluta
- Convertir el premio en dinero en cuenta a la vista en un banco que aplique la retención fiscal, y tomarse unos días o semanas para tomar la decisión del punto 3.
- Buscar asesoramiento de family offices y contratar al menos uno (dependiendo del volumen del premio)
- No gastar significativamente hasta generar rentas (cuestión de semanas)
- Supervisar constantemente a los family offices contratados y formarse a través de ellos.
La Diosa fortuna no suele cruzarse dos veces en nuestras vidas en forma de premio Gordo ni de primitiva o Euromillón. Por ello los errores que cometa el afortunado a partir del mismo día del sorteo serán irreversibles. Y determinarán, no sólo la evolución de su nueva fortuna sino también el futuro bienestar para el agraciado y para los suyos. Si no se tienen en cuenta estas 5 claves, por muchos ceros que tenga el premio, la cadena de errores se lo acabarán comiendo al cabo de los años, y con ello la felicidad de unos agraciados que creían tener la vida resuelta para siempre y que acabarán siendo desgraciados. Ah, por cierto, las mismas 5 recomendaciones son aplicables a premios menores, es decir, de menos de 500.000 euros.
P.D. Quizá te guste releer el artículo que escribimos en 2009 sobre las posibles evoluciones de los premiados: «Si te toca la Lotería tienes tres opciones» o este otro caso real de final trágico.
Pues menos de 500.000 es lo que se va a cobrar si te toca el Gordo de Navidad, claro está si es que se lleva un décimo. Pero imagino que algo se podrá hacer …
Todos los años hacéis la misma recomendación por estas fechas y la verdad es que nunca está de más.
Felices Fiestas
Franlodo 17/12/2014Así es Franlodo, con un décimo después de impuestos la cifra neta se queda en 320.500 eur más la mordida del banco por la gestión… Pensándolo bien, sería más interesante que el FO se ocupase desde un buen principio de negociar esa gestión con los bancos para minimizar también esa comisión por el cobro del décimo 🙂
Lo advertimos cada año por estas fechas, y la verdad es que la inmensa mayoría de afortunados siguen cometiendo los mismos errores lamentablemente, y es una pena.
Felices Fiestas también para ti y los tuyos!
ClusterFamilyOffice 17/12/2014